La Justicia falla por fin a favor de la libertad de los cristianos
Por fin la Justicia falla a favor de la libertad religiosa en España, aunque sigue pasando desapercibida una realidad que está cada vez más vigente: el rechazo a los cristianos. El Tribunal Supremo ha condenado a un año de prisión por un delito contra la libertad religiosa a cada uno de los cinco jóvenes que irrumpieron gritando consignas abortistas en la iglesia de Sant Miquel de Palma de Mallorca en febrero de 2014, interrumpiendo la celebración de la Santa Misa.
El problema es que si los grandes medios de comunicación alertan del riesgo de que surja islamofobia en la sociedad, el verdadero problema es la cristianofobia. Según las últimas estadísticas de la OSCE, un organismo que no es sospechoso por su simpatía con el catolicismo, más de dos tercios de los ataques contra colectivos religiosos que se perpetraron en 2016 en España tuvieron como víctima y objetivo a cristianos.
Los obispos españoles el pasado noviembre ya señalaron que “la proposición de ley LGTBI impulsada por Unidos Podemos y admitida a trámite en el Congreso es una “propuesta fundamentalista con visos inquisitoriales” con la que se coartarían libertades fundamentales y se instauraría “una verdadera censura”, excluyendo otras visiones acerca del ser humano distintas de la ideología de género. A esto se suma propuestas de distintos partidos como Ciudadanos, el Partido Popular y el Partido Socialista obre la maternidad subrrogada, el aborto o la educación, que hacen pensar que aunque la sentencia del Supremo es una buena noticia, es una decisión aislada en un país en el que cada vez hay menos respeto a la libertad de los cristianos.