Italia se rinde a la eutanasia gracias a su propio Parlamento
La Europa de las raíces cristianas se está pareciendo cada día más a la Europa de la cultura de la muerte. Al menos en el caso de la Europa occidental. La última noticia que corrobora esta tendencia es que el Parlamento Italiano ha aprobado la Ley de “Disposición Anticipada del Tratamiento”, una especie de testamento vital por medio del cual un paciente mayor de edad con plenas facultades mentales puede disponer no recibir tratamiento, hidratación o nutrición artificial por parte de las autoridades sanitarias en caso de enfermedad terminal. Es irónico, ya que la conducta suicida es precisamente un tipo de problema mental, y que un enfermo terminal no quiera recibir lo necesario para vivir cómodamente en los últimos momentos de su vida es la típica tendencia depresiva en personas no acostumbradas al dolor.
La aprobación de la ley ha sido gracias a los 180 votos a favor y 71 en contra de los senadores.
Por supuesto, la ley no contempla la objeción de conciencia por parte de los médicos que sientan conflictos éticos derivados de las actuaciones que tendrán a llevar a cabo por la nueva norma que abre la puerta a la eutanasia. La Liga Norte y la Conferencia Episcopal Italiana se ha opuesto a la norma tajantemente.