Un golpe de estado simbólico, la nueva tomadura de pelo…
ESTO PINTA muy mal. Mentiras por aquí, mentiras por allá. Juego sucio por un lado, juego más sucio por otro. En unos y otros, contradicciones. Nos creen tontos. Como si se riesen de nosotros.
Son las 23:00 horas del día 9 de noviembre de 2017. El Canal 24 horas de TVE ha dado la noticia de la fianza permitida a la Forcadell -presidente que fue del Parlamento de Cataluña- y a cuatro de los cinco de la Mesa, para no entrar ipso facto en la cárcel. Así, han sido sentenciados a prisión preventiva aunque eludible con una fianza de 150.000 euros la primera y 25.000 cada uno de los restantes.
A continuación, el entrevistado sr. García Albiol -presidente del PP en Cataluña- estaba feliz, y ha puesto por las nubes al presidente Rajoy como gran gobernante y estadista. Ahora bien, pudiera decirse al Sr. García Albiol que es tonto creer que a partir de mañana las expectativas en Cataluña son las de “otra Cataluña”, y que los gatitos se han vuelto muy mansos. También lo es creer que si Puigdemont ha perdido el equilibrio y está fanatizado en Bruselas -así dice-, es porque el tal Junqueras estará reflexionando en la cárcel.
La “gran baza” del sr. García Albiol de cara a lo ocurrido, de cara a los nacionalistas “moderados” y ante las próximas elecciones, es mostrar que los nacionalistas como Forcadel se han desmentido a sí mismos. ¿Seguro? Pues luego dice que los sondeos ante las elecciones de diciembre dan la mayoría a la Ezquerra, que los socialistas están acercándose y buscando un acuerdo con Podemos, con los nacionalistas “moderados” (dirá que son tan independentistas como los radicales) y con la misma Ezquerra Republicana. ¡Pues menuda baza! ¡Sí que da para mucho que los pillados con las manos en la masa y a punto de entrar en chirona se “desmientan” a sí mismos como lo han hecho!
Es contradictorio que el sr. García Albiol – presidente del PP en Cataluña- critique a los actores que -dice- hoy reconocen que hubo un tremendo engaño a la sociedad catalana, que han reconocido que han mantenido una mentira, que han rectificado de una forma sonora delante del Tribunal Supremo, que han reconocido su error, que han descubierto que han llevado a cabo un gran engaño, que ahora se desvinculan de la independencia unilateral, que todo lo que hicieron fue algo simbólico… mientras el sr. García Albiol elude la pregunta del periodista de si tales personas pueden presentarse a las elecciones de diciembre. Sí, es aberrante -decimos- que quienes han dado un golpe de Estado puedan ser a los dos meses candidatos, cargos electos, y ocupar de nuevo el poder político en Cataluña. ¿Se quiere rebobinar la realidad como si nada hubiera pasado para ceder al separatismo lo que no podía cederse por cauces ilegales?
Es contradictorio que el juez del Tribunal Supremo don Pablo Llarena deje libres con fianza a quienes han dado un golpe de Estado, porque ahora, cogidos con las manos en la masa y a punto de ingresar a prisión, los investigados han dicho que acatan el artículo 155 y la Constitución, que la declaración de independencia fue algo simbólico, y que renuncian a la declaración unilateral de dicha independencia. La Forcadell, después de las barbaridades que ha lanzado a los vientos contra los españoles y España, y después de lo que ha hecho, ha reconocido por escrito que la declaración de independencia era una mentira. Pues bien, ¿qué es eso de renunciar ahora que al parecer han perdido el golpe de Estado y hasta los papeles? ¿O es parte de un gran teatro?
Es contradictorio que el sr. Xavier García Albiol diga que la policía ha actuado muy bien en las huelgas de ayer en Cataluña, mientras da la razón a la gente que se quejaba de los prolongados cortes de carreteras, de los centenares de coches parados etc., y mientras para él ha sido un éxito que los 70 puntos cortados a las seis de la mañana terminasen siendo 64 puntos levantados por las policías ¡nada menos que a las doce del mediodía! Al final de tanto recoveco le salió la verdad: para el sr. García Albiol lo mejor es que no se haya producido ni dado pretextos para un encontronazo entre los huelguistas asociales e incívicos y las fuerzas del orden. Lo proporcional sería que no hubiese ni palos ni heridos -lo que por otra parre nadie desearía de entrada- y que los huelguistas incívicos hiciesen caso a las policías.
Es contradictorio que el sr. Xavier García Albiol diga que la Forcadell y cuatro miembros de la Mesa dan vergüenza por lo que han hecho, hayan dado un espectáculo bochornoso, sean un grupo de farsantes e irresponsables, y produzcan indignación, mientras a su vez dice que deben pedir perdón a la sociedad catalana por haber reconocido que han estado engañando a la población durante dos años, y que deben irse a su casa. Tras lo ocurrido -añade- la Forcadell y cuatro de los suyos sólo han velado por sus intereses personales, dejando colgada a la población catalana. Eso sí, nuestro buen político anuncia que los golpistas no se irán de rositas, que tendrán que ir a juicio, y que les espera un futuro complicado por el dolor que han provocado en Cataluña durante dos años. ¿En qué quedamos? ¿Qué es bueno hacer? ¿Actuar -o casi no actuar- como la policía ayer día 8-XI?
Es contradictorio que el sr. García se manifieste principalmente constitucionalista y se fundamente a la Constitución de las nacionalidades etc. que ha originado la deriva separatista hasta llegar al golpe de Estado en Cataluña, mientras dice reafirmar los sentimientos españoles en base a la Constitución para que Cataluña se mantenga como parte de España.
En contradictorio que el sr. García Albiol denuncie el nacionalismo como una sinrazón, y sin embargo considere que puede atraer a su campo al nacionalismo moderado, mientras dice que cualquier nacionalismo -también el moderado- es malo por independentista. ¿Cree que puede atraerse al nacionalismo moderado “de buena fe”, porque que Forcadell ha reconocido por escrito que la declaración de independencia era una mentira, que ella asume la Constitución y el artículo 155? ¿Así cree que la tiene en el bote, a la vez que declara ingenuamente que el independentismo ha sufrido un duro golpe en la credibilidad de sus dirigentes dado que al fin los catalanes pueden ver que sus políticos han estado engañándoles durante dos años?
Increíble tanta ceguera y engaño el del sr. García Albiol. Que Santa Lucía le devuelva la vista.
¿Tanto cuesta al sr. García Albiol decir que la policía y los jueces casi no deben actuar en estas circunstancias, que se va a pedir a los golpistas ser buenos chicos para a continuación darles lo que piden, y que el PP es el gran timonel que necesita la España de las manifestaciones millonarias, sana e imperial? El mal entra en España por sus élites, como casi siempre, y yo no sé quien es más farsante si los unos o los otros que forman parte de la misma y enorme farsa.
Por último: ¿quién ha pedido iniciar el proceso de la reforma constitucional?: ¿el sr. Rajoy, el ministro de Exteriores Alfonso Dastis o ambos con los golpistas? Desde luego, el pueblo español no lo ha pedido. Por eso, una vez más está claro que esta democracia no es representativa. Cinismo es lo que dice Dastis: que se ha abierto en el Congreso una comisión de estudio para la reforma de la Constitución en un sentido territorial, con el objeto de “acomodar mejor las aspiraciones de algunos catalanes”. Pues éstas -¡oh golpistas con suerte!- serán acomodadas ahora mismo aunque sea contra España y los españoles, sin mandato alguno de estos, y sí con el mandato de la plutocracia internacional que tiene a España como lugar de ensayo y prueba.
José Fermín Garralda