Sinfonía de una vida. Reseña de la biografía de Alvaro d’Ors
Por A.U.
Sinfonía de una vida *
Como señaló el propio D. Álvaro D´Ors, en una de sus obras más reeditadas, Una introducción al estudio del Derecho, resaltando que era “una”, porque puede haber otras tan legítimas o más que esta. Me refiero claro está a esta reseña y no a la biografía que la motiva.
Estamos ante la biografía de un gran intelectual, un consumado romanista de fama internacional, catedrático universitario en Universidades estatales, Granada y Santiago de Compostela y de Universidades Privadas como la Universidad de Navarra. Padre de familia numerosa e hijo de un insigne escritos, Eugenio D´Ors. D. Álvaro D´Ors, así lo relata detalladamente el libro que reseñamos, a finales de los años 30, concretamente en 1937 se incorpora a las filas del Carlismo, en aquellos momentos en la forma de requeté del Tercio Burgos-Sangüesa. Pero no estamos ante la biografía de D. Álvaro D´Ors carlista, y claro que habría material para escribirla, pero estamos ante un rica y más amplia biografía, casi 700 páginas, de uno de los pensadores españoles del siglo XX, en la que, como es natural, el carlismo ocupa un lugar importante.
Nos centraremos en estos aspectos que supongo serán los de más interés para los lectores, aunque recomendamos la lectura completa de la biografía, porque todo encaja y además la pluma ágil de su autor, hace que se hagan muy llevaderas ese montón de páginas.
En primer lugar, ¿cómo llega D. Álvaro al carlismo? Aunque Eugenio D´Ors, su padre, había acuñado aquella frase que se hizo famosa “lo que no es Tradición, es plagio…”, D. Álvaro no se había movido, antes de la guerra, en ambientes carlistas, ni incluso tradicionalistas. Se forma en su casa con su madre y luego en el Instituto Escuela, que sigue los principios pedagógicos de la Institución Libre de Enseñanza. El 18 de julio se encuentra en casa de su abuela en Argentona, un pequeño pueblo cercano a Barcelona y no intenta pasar a Francia para incorporarse a la llamada zona nacional. Sigue su vida de estudioso, recluido, entre otras cosas porque su padre había manifestado su adhesión al Alzamiento desde París y hasta junio de 1937, no decide aventurarse y cruzar los Pirineos. Una vez en Francia, sin papeles, porque los había destruido por si era detenido, se acerca a París para darle un abrazo a su padre. En estos momentos, su maestro José Castillejo, liberal discrepante con ambos bandos, le propone que se vaya a Londres para terminar sus estudios e iniciar su vida académica, lo cual suponía desentenderse de lo que estaba ocurriendo en su Patria.
Desoyendo estos cantos de sirena el joven Álvaro D´Ors se entra en España por Irún y se incorpora, en un primer momento, como soldado del Ejército Nacional, pero esta experiencia y el ambiente que encuentra en los Cuarteles no es de su agrado y deserta, para incorporarse al frente de batalla. Lo insólito del caso le libra de un Consejo de Guerra, haciéndose realidad su incorporación al Tercio de Requetés Burgos-Sangüesa, en el que se encontraba como médico su hermano Juan Pablo. Según se relata en la biografía “no tenemos información de antecedentes familiares carlistas”, salvo algún precedente muy remoto. En su libro La violencia y el orden, de lectura recomendada para quién no lo haya hecho, es especial para los más jóvenes, en estos momentos que tanto se habla de la llamada “memoria histórica”, el propio D´Ors destaca que “muchos no carlistas sentimos esa poderosa atracción y nos incorporamos, sin reservas al Requeté. El ideal de Requeté llegó a constituir, si se puede decir así, un mito de la Cruzada, que correspondía a la realidad de un valor sin odio, de un sacrificio y alegría incomparable…”
El Requeté Álvaro D´Ors tuvo como teniente a Manuel Gil de Santibáñez “hombre de fe recia, que ya en plena contienda procuraba seguir actuando como católico, aun en las circunstancias adversas de la vida en el frente…, por mediación de él apreciará un ambiente distinto del que ha conocido en los Cuarteles de Pamplona y Burgos. En este contexto, que tan bien resume el trilema carlista de <Dios, Patria, Rey>, siente que por fin está en su sitio, haciendo lo que debe hacer y plenamente identificado con aquellos ideales…”
Terminada la guerra, Álvaro D´Ors, se reincorpora a las aulas para terminar sus estudios e iniciar su larga y fructífera vida académica, pero no se separa de su militancia política, ni menos se sube a la ola de la dinastía con más posibilidades de suceder al general Franco como titular de la recién Instaurada Monarquía del 18 de Julio.
“Lealtad obliga”, son sus propias palabras para explicar lo ocurrido a finales de los 50. D. Antonio Fontán “me puso un telegrama a Santiago para que aceptara la precepturía de D. Juan Carlos (con otros), contesté con otro telegrama, recuerdo el gusto de escribirlo -nunca tuvo más luz la sala de Correos- en que alegaba para negarme: <lealtad obliga>…”
D. Álvaro era un monárquico que, renunciando a lo que esto hubiese supuesto, se aleja de ser un simple cortesano, como habían hecho por desgracia muchos carlistas de insignes familias vinculadas a la Causa.
Producida la pérdida de la legitimidad de ejercicio, por parte del Principe de Asturias, D. Carlos Hugo, hijo del Rey D. Javier, mantuvo su relación con el sector tradicionalista del carlismo, recibiendo con alegría, ya a finales de los años 80, la necesaria unidad de los distintos grupos carlistas, bajo la denominación de la Comunión Tradicionalista Carlista, a cuyo Consejo Nacional perteneció hasta su fallecimiento.
Mantuvo contactos cercanos con carlistas de fuerte militancia, como Miguel Garisoain, Francisco Javier de Lizarza, José Arturo Márquez de Prado, Javier Nagore, Antonio Segura, Rafael Gambra o Federico Wilhelmsen, por citar algunos de los más significativos, participando en multitud de conferencias o actos como a finales de los 80 en Isusquiza (Álava)
En marzo de 1992 en una carta a su discípulo Emilio Valiño le decía “… la única ideología no-democrática, aunque sí fundamentalmente <popular> -y cristiana a la vez- es nuestro Tradicionalismo, eso me mantiene fiel a mis ideales políticos: hay como una antorcha que no se debe dejar apagar, a pesar de que ahora poco caliente…”
También en marzo, pero esta vez del año 2000, en carta a Dña. María Cuervo Arango, Presidenta de la Comunión Tradicionalista Carlista le dice “… me parece que, en tanto no se ofrezca una coyuntura histórica que permita a la <Comunión> tener una intervención política activa en España, lo que justifica nuestra <Comunión> es el salvar unos principios amplios de la <Tradición>, frente a la <corrección política democrática> que hoy impera. Por eso mismo, me parece que conviene evitar, en lo posible, una terminología que es la propia de nuestros enemigos…” Este parecer ya le había hecho predecir lo que ocurriría, por desgracia, con la errática estrategia de D. Carlos Hugo y sus hermanas.
Para completar esta interesante biografía que motiva estas líneas, recomiendo completarla con la lectura de otros textos de D. Álvaro, empezando por el ya mencionado La violencia y el orden, donde se encuentra según su biógrafo, “buena parte del pensamiento político de Álvaro D´Ors…”, así como Ensayos de teoría política, publicados por EUNSA en 1979, en especial, el ultimo ensayo, Gabriel o del reino (diálogo, 1955). Así como trabajos menos conocidos como el discurso pronunciado en el Acto de Montejurra en 1965, sobre la legitimidad o la conferencia sobre la Comunión Tradicionalista y los partidos políticos, pronunciada en 1962 en el Círculo Carlista de Pamplona o el pequeño opúsculo publicado por la Editora Nacional sobre Las formas de gobierno y la legitimidad familiar. Así mismo se recomienda los artículos publicados en la revista VERBO, incomprensiblemente olvidada en esta completa biografía, a los que se puede acceder a través de la página web de la Fundación Speiro. https://fundacionspeiro.org/revista-verbo
El autor del libro, Gabriel Pérez Gómez, conoce perfectamente al biografiado, lo ha tratado en la intimidad y lo quiere, no en vano es uno de sus yernos, el resultado son casi 700 páginas que enganchan, se leen fácilmente y son de recomendable lectura, no sólo para los que vivieron o tuvieron relación con los hechos y personas citados en el mismos, sino para los jóvenes que pueden acercarse de esta manera a una de la figuras más importantes del tradicionalismo del siglo XX y del mundo universitario.
*Álvaro D´Ors. Sinfonía de una vida.
PÉREZ GÓMEZ, Gabriel.
RIALP. Madrid. 2020.
Un comentario en “Sinfonía de una vida. Reseña de la biografía de Alvaro d’Ors”
Ramón de Argonz
Muchas gracias por la reseña. Me compraré el libro, que ya lo he visto en librerías.