Reflexiones sobre un viaje a Peñiscola
Hay un producto de calidad que se llama Carlismo, y digo esto porque a principios de Agosto, dos amigas y yo hicimos un viaje de estos, en el cual sales de casa, y el mismo día regresas. Y esta experiencia unida al carlismo, me ha hecho reflexionar dejadme que os cuente.
Eran las siete treinta de la mañana, cuando salimos de Cullera, en el autobús. Este viaje estaba organizado por una empresa comercial, no digo su nombre porque la finalidad de este artículo, no es hacerles propaganda. El autobús estaba casi lleno de pasajeros, íbamos a Castellón concretamente a Peñiscola, población histórica, porque en su castillo albergo al Papa Luna, el cual en su vida intervino, el gran santo valenciano San Vicente Ferrer.
Se presentaba un buen día, el autobús paro en un hotel, el cual teníamos preparado un abundante desayuno, compuesto de fiambre, más pan, mantequilla, y café con leche. Después de desayunar vino el momento de la propaganda comercial, pasamos a una sala donde dos jóvenes nos atendieron. Uno estaba dedicado a la parte administrativa, es decir a cobrar los veinticinco Euros que cada uno nos había costado el viaje, y apuntar los nombres por si era la primera o la segunde vez, que íbamos. El otro joven nos dio las charlas sobre los productos que se vendían, nos habló con un lenguaje claro, accesible y apropiado para todos, nos explicó las funciones del organismo, en especial la sangre, así como los beneficios que obtendríamos si comprábamos el producto. Más bien parecíamos todos los que estábamos presentes en este lugar, estudiantes de medicina escuchando a su profesor, que turistas que iban a un lugar determinado. Convenció tanto que los productos se vendieron a buen precio, llegado al mediodía, comimos paella de primer plato, y pescado de segundo, y un flan de postre.
Al terminar de comer subimos al autobús rumbo a Peñiscola, al llegar al puerto entramos en el barco, donde disfrutamos de las vistas de esta bonita población, donde el turismo, la agricultura, y la pesca, se contaginan, siendo la base de su riqueza económica. Íbamos navegando hacia el mar abierto desde la proa del barco divisamos a los lejos el castillo de lo que fue el hogar del Papa Luna, mientras el oleaje del mar jugaba como si fuera algo insignificante la nave, donde nosotros estábamos. Al desembarcar nos esperaba el autobús y regresamos a Cullera.
Que se puede decir del viaje, que también el carlismo es un producto de calidad, que deberíamos saber vender, a lo mejor digo esto y resulta que hay grupos de los nuestros que ya lo hacen, pero la verdad es que yo personalmente no los conozco. En mi tierra suele decirse hay que buscar el sí porque él no ya lo tienes, pero sí que deberíamos pensar que la Comunión Tradicionalista Carlista, es en España una gran desconocida, y hay que darla a conocer, si queremos en un futuro presentarnos a las elecciones.
Tengo la experiencia personal, que hace cuatro años yo no sabía que esto existía, aparte de esto voy a contar una anécdota, estando en Valencia en una conferencia organizada por un Círculo Cultural de la comunión, la cual trataba sobre” la Doctrina Social de la Iglesia” y en el que el conferenciante era un correligionario nuestro , al terminar hice un comentario y dije: “ El Carlismo la mayoría de la gente incluso mayor, cree que este movimiento a desaparecido, porque están convencidos que esto es cosa del pasado, dadas las circunstancias deberíamos poner todos los medios necesarios, para darlo a conocer actualmente a los españoles.
Cuando termino todo, al salir del salón, una señora mayor se acercó a mí, y me comento diciéndome: “Me ha gustado como ha hablado usted, mi padre era carlista, y yo de pequeña margarita y yo no sabía que el carlismo a un estaba, si he venido aquí, ha sido porque una amiga mía me ha traído y es cuando me he enterado que aún estaba vigente.”
Debemos de tomar ejemplo de propaganda de estos viajes, comerciales, porque no estaría mal , que nuestros círculos culturales , organizaran excursiones y viajes de esta índole para amigos y simpatizantes ,pienso que copiar no es mala cosa, pues todos lo hacemos , y a la vez aprovechar para propagar la CTC, e informar de nuestra ideología como un producto de primera. Sé que hacerlo no es fácil, hace falta buena voluntad y colaboración, como también ganas de trabajar. Creo que la Comunión no tiene abundancia de miembros, pero existe calidad cosa que hace que todo se multiplique.
Estoy segura que en la Comunión Tradicionalista. Carlista, hay correligionarios nuestros con carisma, para organizar excursiones o viajes, en los cuales se dé opción para hablar y dar a conocer nuestra corriente ideológica, y al mismo tiempo vender todo el potencial de propaganda carlista, cono puedan ser libros CD y otros productos que propaguen nuestros ideales.
Busquemos el sí con la confianza, puesta en aquel que lo gobierna todo lo nuestro, Cristo Rey. Que Dios os llene de bendiciones gracias.
MARIA JOSÉ BOU BERTOMEU