1º de Octubre y España: lo peor está por venir
EL FONDO del problema político de la secesión y golpe de Estado de los separatistas (burguesitos y comunistas) en Cataluña -la Cataluña inventada– es religioso. Esta relación la explicó hace cien años, con detalle y profundidad de profeta, el obispo de Vich José Torras y Bages (Los excesos del Estado, 1906, 67 pp.).
El golpe de Estado bolchevique fue en Octubre y hubo guerra civil. El golpe en Cataluña y Asturias de 1934 fue en Octubre, y será una guerra civil. Para este 1-O se consumará el golpe dado ya antes por la Generalitat y el Parlament: fracasará y sin que por ahora haya guerra civil, habrá una entrega de España. Luego, nuevo golpe -suponemos que Vd. sabrá de quién- para llegar al final.
Rajoy sólo habla de legalidad -no de sus votantes, muy españoles, y menos de España-, a defender incluso con el art. 155 ó la Ley de Seguridad Nacional. A día de hoy -22 de septiembre- la Justicia ha desmantelado la organización del referéndum ilegal y la Guardia Civil ha incautado millones de papeletas, resistiéndose la Generalitat a reconocer que aquel es imposible. Los Mossos d’Esquadra no protegen a los jueces y agentes del Estado, y la alcaldesa de Barcelona (Podemos) cede locales para consumar el golpe, mientras la Guardia Civil atribuye el delito de sedición a varios altos cargos detenidos… Los jefes de Podemos y Bildu (amiga de ETA) -ambos marxistas- apoyan el golpe de Estado como en 1934, el PNV pone la negociación con el PP al borde del colapso y pide el Estado confederal, el PSOE se apresura a taponar fugas en su seno, las tales presidente Barkos (Geroa Bai vs. PNV) y presidente Aznarez (Podemos) en Navarra apoyan a los que “incumplen la ley” y quiebran el “Estado de derecho”.
Si es nuevo este golpe respecto a 1934, no lo es la turbia conquista del poder y de la sociedad por los separatistas. La cosa está peor que en 1934, poeque “la casta” habla de dialogar y negociar con los golpistas de izquierda como hace poco lo hicieron con los etarras, pues el Liberalismo -masónico- está a merced de unos y de otros desde la Constitución de 1978 que es a modo de chicle que todos utilizan y todos incumplen. Comentaristas, periodistas que opinan sobre todo, clérigos entrometidos de alto copete, políticos de aquí y de allá… hablan de negociar y dialogar con los golpistas y los que odian a España, la rompen, y nos roban Cataluña a todos los restantes españoles. Qué fácil es decir eso cuando no se sabe hacer nada más. ¿Saldrá rentable a los causantes e impune eso del golpe de Estado en España, como en buena parte ha salido políticamente rentable el terrorismo etarra a la ultraizquierda separatista? ¿Qué es eso del “cuatripartito” en Navarra en favor de Bildu… sino el engaño político de los vencidos con consentimiento y aquiescencia del sistema? ¿No están presente en él los amigos de los terroristas, inspirándolo y dirigiéndolo además, sin condenar el terrorismo etarra? ¿Cómo podremos llamar a esta situación?
Este diálogo con los separatistas catalanes anticatalanes carece de cauce, finalidad y objeto. ¿Por qué? 1º) No hay diálogo si se cambia de sujeto, que no es la sufrida Cataluña sino la anti España, la antítesis marxista y el idealismo hegeliano de un burguesito y a veces de un muchacho tan ladrón… como los que hay 2º) Cuando nuestros golpistas pierden, utilizan el diálogo para ganar algo -hoy lo harían con goleada- aunque hayan vulnerado el Derecho, las leyes fundamentales, el Estatuto, y las resoluciones judiciales, aunque sean unilaterales, prescindan del resto de España, y estén manipulados por los grupos de presión, ideológicos y por cierta Secta que es todo menos democrática. 3º) En la política tradicional todo eso sería innecesario porque España es como un gran río con afluentes muy hermosos, una nación con una estructura política que debiera de ser Foral y no estatutaria. Lejos del centralismo de Madrid o de la capital autonómica -peor éste por más cercano-, el Fuero es Derecho, goza de derechos propios y es pre constitucional, a diferencia del Estatuto, que es Poder (férreo poder) y delegación de un Estado todopoderoso pero auto debilitado por una supuesta democracia secuestrada por la partitocracia: niños grandes elegidos a voleo y con un inmenso poder.
El 21 de septiembre los anti-ciudadanos separatistas se lanzaron a los juzgados y a la calle. La tensión, gravísima. ¿La causa última?: la descristianización, el Estado liberal, el entreguismo de los Gobiernos “de Madrid” a favor del nacionalismo periférico creyendo que iban a controlar su separatismo innato, el concepto de Estatuto (mucho poder por delegación), la partitocracia, la fuerte politización del clero católico, la labor de la Secta, y -¡ah!- el deseo de ocultar la corrupción…
Los separatistas han satisfecho su ego narcisista, pues de ellos y de su golpismo se habla en todo el mundo: en la UE, Trump, Putin… Claro que no hablan para bien de ellos. Pero cuando “el sueño de la razón produce monstruos”, es decir, cuando se da rienda suelta a la pasión desatada, por lo visto lo único que importa es que se hable de uno mismo. Hasta que esto desemboque en el guerracivilismo provocado de nuevo por los comunistas que utilizan a su antojo a los separatistas.
La “movida” vendrá después del 1º de octubre. Lo peor está por venir: el Gobierno español, preocupado sólo por la legalidad “democrática” (olvida España, la legitimidad, vive de rentas y engaña a sus votantes), negociará a favor de los secesionistas y España perderá. Es así porque la cúpula de UCD ayer y hoy del PP está -liberal impenitente- llena de complejos, deja la iniciativa política a separatistas y marxistas -siempre unidos-, tiene cautivo el voto de millones de españoles con la complicidad de la jerarquía eclesiástica en España, quiere ignorar qué es España, y permite y cultiva la anti España.
El golpe de Estado va a carecer de consecuencias para los que ahora se comienzan a disfrazar de desobediencia y prevaricación -en vez de rebelión y sedición- para sufrir así las penas irrisorias señaladas en el Código Penal. Es asombroso. Se perdonará a los golpistas del 1-O como a los terroristas etarras, utilizando una triple o cuádruple vara de medir. Ahí está el Sr. Tejero denunciándolo. Será una nueva vergüenza. “La calle” reclamará libertad e indultos para los encausados. Los separatistas y los que ahora se oponen a ellos, reclamarán diálogo y negociación para “reformar” la Constitución de 1978. Por ejemplo, el ministro de Justicia ya ha hablado de tal reforma. Lo exige Pedro Sánchez (PSOE) y lo pide el gran Borrell, que ha dicho bien claro que lo que se está haciendo es un burdo pero calculado “golpe de Estado”. Y no le hacen ni caso. El melifluo PNV, que deja a otros agitar el nogal para recoger él las nueces, propone cándidamente un Estado confederal. Se sumarán los vencidos al carro, auxiliados -ojo a esto- por los comunistas de Podemos en toda España. Los catalanes de bien y los españoles en general sufriremos el chantaje de “la casta” dentro del largo camino hacia el Estado federal iniciado en 1978. La partitocracia corrupta, negociará, y luego lo propondrá al pueblo -¡ah, se nos olvidaba el Pueblo!- para su ratificación. Como en 1978. Y éste, sin líderes propios, abatido y deprimido, seguidita de los que tienen la palabra, no la sueltan, controlan la opinión y mediatiza con la maquinaria de “la casta”, votará que sí. Aunque no quisiera. Así le cocearán de nuevo. La partitocracia, colocada por encima de España y sobre todo los nuevos guerracivilistas, se aprovecharán de una sociedad pasiva convertida desde hace tiempo en un guiñapo que todo lo traga con tal de que le dejen en paz. Pero ni con esas.
Restauren mejor los Fueros, ¡respeten y amen a Dios!, ahí el principio de subsidiariedad, que venga ¡la decencia! -incluso entre cierto clero separatista uno y entreguista el otro- y la urgente recristianización.
Si en 1978 fueron capaces de entregar a Dios, expulsándolo de la Constitución y las leyes, en aras del imposible apaciguamiento -ya hasta dónde ha caído nuestra querida España y los españoles-, ahora serán capaces de entregar a España como nación, Comunidad y pueblo. Mucho cuidadito.
Publicado gran parte de él en el quincenal “Siempre P’alante” nº 791 (1-X-2017), pág. 14