Diario de la desescalada. Lunes 1 de junio
Lunes, 1 de junio de 2020
San Justino, San Fortunato, San Iñigo, San Próculo. Nuestra Señora de la Luz
Comienza el tiempo litúrgico ordinario
6º día de luto oficial
Malas noticias
Sánchez, a por “la última y definitiva” prórroga del Estado de Alarma. El gobierno quiere lograr esta semana el permiso del Parlamento para una nueva prórroga. Sánchez -como si fuera un viejo borracho discutiendo con el barman- dice que sería la última, de verdad, ahora sí, la definitiva y eso suena a que con ella lo único que pretende es rematar la faena. La faena que nos está haciendo. Si a base de concesiones a los separatistas o no se sabe qué trapicheos con Ciudadanos logra el permiso llevaría el experimento totalitario hasta el 21 de junio. En este momento el 30% de la población española sigue en la Fase 1. Las islas de la Gomera, El Hierro, La Graciosa y Formentera han pasado a la fase 3.
¿Está despertando la amenaza islamista en España? La llamada nueva normalidad se está pareciendo cada vez más a la normalidad anterior al virus. Los partidarios del velo islámico, que no deja de ser una especie de primitiva mascarilla sexista, están volviendo a ser noticia. Existe una amenaza real. Es lógico que los musulmanes africanos contemplen la posibilidad de emigrar a España -a lo que ellos llaman Al-Andalus- como una forma de mejorar sus condiciones de vida. También es verdad que en este tipo de noticias se mezclan muchos falsos rumores y mucho miedo entre los españoles que lloran ahora al estilo Boabdil. Lamentan las consecuencias de la nueva invasión, las colas en los servicios de inmigración o las subvenciones y privilegios a los que tan fácilmente acceden, pero no denuncian las causas de la misma como son la baja natalidad de los españoles o las medidas antiespañolas y laicistas de los sucesivos gobiernos.
La crisis demográfica y una imagen de lo que podría haber sido pero no fue.
Violencia y huracanes en América. Mientras continúan, a la baja, los efectos de la pandemia del coronavirus, retornan a la actualidad americana los habituales “disturbios por violencia racial” en Estados Unidos y se inaugura la temporada de huracanes en el Caribe. Trump ha decretado toque de queda en 25 grandes ciudades. Mineápolis, Los Angeles, Nueva York… la excusa de “la violencia racial de la policía” está sirviendo, como viene siendo habitual en estos brotes periódicos de un problema estadounidense crónico, para que bandas organizadas se dediquen a saquear comercios. No parece que robar móviles de una tienda vaya a solucionar ninguna clase de problema racial. También resulta extraño y huele a manipulación el tratamiento mediático que los medios izquierdistas están dando a estas algaradas, que se han extendido a Londres, y que están siendo utilizadas para desgastar al presidente Trump por parte de sus numerosos adversarios. Mientras tanto, en el Caribe, se enfrentan a otro problema recurrente que, esta vez, no pueden decir que sea culpa de Trump. El huracán Amanda está golpeando en estos momentos en El Salvador y Guatemala.
Buenas noticias
Ayer la Iglesia celebraba la festividad de Pentecostés. La gran fiesta del Espíritu Santo, que es Quien concede el don inefable de la fe. El mundo apóstata no creerá aunque vea resucitar a un muerto. La dureza de corazón y la confianza en la pseudorreligión científica, aunque ésta se encuentre en horas bajas, impiden interpretar la simple realidad. Fíjense en el gráfico que hoy publicamos que recoge el dato oficial de los fallecidos por COVID-19 en Italia. ¿Saben cuál es el día exacto del pico de la pandemia? el 27 de marzo. El día que se registraron 919 muertos. El día en que el Santo Padre, solo, bajo la lluvia, hacía con el Santísimo una bendición solemne para la Ciudad y para el Orbe.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, está demostrando en algunas de sus decisiones una libertad de espíritu envidiable que no es extraño que saque de quicio a los escritores del relato progre. Hace unos días nos sorprendía afirmando que los templos, los lugares de oración, son establecimientos y servicios esenciales. Unas declaraciones que ni siquiera los máximos líderes religiosos se han atrevido a hacer con esa rotundidad. Después, ha decidido escenificar su ruptura con la Organización Mundial de la Salud denunciando que se trata de una institución controlada en última instancia por el Partido Comunista de China. Ahora, enfrentado a Twitter y las grandes empresas que controlan las redes sociales de internet, ha tomado medidas para limitar sus abusos. ¿Se imaginan que su compañía telefónica quisiera intervenir en sus conversaciones? Con esta sencilla reflexión Trump ha puesto el dedo en la llaga para acusar a unas compañías que presumen de neutralidad pero que en realidad son instrumentos cada vez más potentes para el control social y la difusión del llamado pensamiento único.
Siguen las protestas. Tienen que seguir. Hay que volver a pasear… Después del parón provocado por las expectativas que surgieron en torno a las manifestaciones automovilísticas de Vox se hace cada vez más evidente la necesidad de que continúen las protestas. Movimientos sociales, iniciativas particulares, caceroladas vecinales… todo puede sumar y especialmente si se hace, como venimos animando desde Ahorainformacion.es en convocatorias espontaneas, vecinales, no partidistas. El gobierno del engaño permanente, de la corrupción, de la gestión criminal, de la agenda sectaria, del empobrecimiento nacional no puede irse de rositas aunque se gaste millones de dinero público en repetir que “salimos más fuertes”. La única forma de salir más fuertes de todo esto será pidiendo a Dios que nos libre del mal gobierno y logrando una respuesta social de rechazo general al sistema de partidos.