Efemérides: 16 de julio del año del Señor de 1212, las Navas
Requeté
Tal día como hoy a las diez de la mañana (12 de la mañana actuales) en la nava de lo que hoy es la pedanía de Miranda del Rey-Concejo de Santa Elena-, cuesta arriba y con el sol de enfrente, se iniciaba el ataque de los Ejércitos de las Españas que terminó con la derrota de las huestes mandadas por Al-Nasir ( el Miramamolín de los cristianos) que dejaron en el campo casi la mitad de sus componentes.
El rey Alfonso VIII de Castilla (en algunas crónicas aparece como IX) solicita del papa Inocencio III la declaración de Cruzada, en la que el arzobispo de Toledo, el navarro Jiménez de Rada, tendrá un gran papel. El ejército cruzado estará formadado de un componente no desdeñable de ultramontanos, muchos de ellos provenientes de la cruzada de los albigenses que quedará aparcada temporalmente. Este ejército se reunirá en Toledo, en lo que hoy es la Huerta del Rey y a la cita acudirá el rey de Aragón Pedro II el Católico, el más caballero de los tres tenores que cantaron las cuarenta en dicha batalla a Miramamolín. También acudieron, con los permisos de sus reyes, caballeros de Portugal y León.
El 19 de junio partirá la vanguardia con los ultramontanos mandada por don Diego López de Haro -Señor de Vizcaya- y un día después el resto del Ejército al mando de ambos reyes.
Después del aciago día de Malagón -tarde noche del 24 al 25-, en él no brilló el honor de las armas sino el odio sanguinario de los ultramontanos, se llega al castillo de Calatrava junto al Guadiana – hoy en Carrión de Calatrava-. Tomado éste se intenta repetir la bellaquería de Malagón por parte de los ultramontanos a lo que la enérgica oposición de los Reyes hará que éstos abandonen la empresa so pretexto, que a nadie convence y no repetiré.
Mientras el Rey Alfonso parte a Alarcos para salvar el honor mancillado 17 años antes -lo que logrará el 5 de julio- el rey Pedro espera una jornada ante las nuevas de que don Sancho, Rey de Navarra llega con unos doscientos caballeros y sus peones correspondientes. Quedado convenido que se verían todos el día ocho de julio en el castillo de Salvatierra -entre Calazada de Calatrava y Aldea del Rey-. Este castillo no fue tomado y el día 9 hacen un alarde -vulgo, desfile- y parten buscando el paso de Sierra Morena por el llamado, poco después, Puerto del Viso. El día trece toman el castillo de Castro-Ferral que había sido de la orden de Calatrava y ocurre el incidente tan manido del pastor, en el puerto del Muradal y cuyo nombre, que no aparce en los anales, fue dado por llamar posteriormente Martín Halaja. Apareciendo el Ejército por lo que hoy se llama el puerto del Rey, descienden el 13 y el 14 a lo que sería el campo de batalla, aprovechando una antigua calzada romana.
Después de descansar el día 15, domingo, y de desplegar el Ejército, éste (compuesto de algunos portugueses y leoneses, castellanos con su Rey, navarros con su Rey y las mesnadas de la corona de Aragón con su Rey, junto con las órdenes militares de Calatrava, Santiago, San Juan y el Temple) se encuentra dispuesto. No se sabe el número de combatientes por uno y otro lado ya que las cantidades infladas no son creíbles para la época. Se calcula que Los ejércitos de las Españas se compondrían de unos 12.000 hombres, y entre 15.000 y 20.000 por el musulmán, que había acudido bajo la llamada de la Yihad predicada por el norte de África y Andalucía.
La batalla de las Navas, fue la primera y gran batalla ganada por lo critianos durante el largo período de la Reconquista, fue una gesta auténticamente española (los portugueses también era, se sentían por entonces y son tan españoles como los demás) pues de los extrajeros quedaron unos doscientos o trescientos, y lo que es lo más importante, en ella se decidió la suerte de la Reconquista. Ciertamente la conclusión de ésta aún tuvo que esperar 280 años, pero el fiel de la balanza se decantó finalmente desde ese día del lado cristiano.
La importancia fue tal que durante buena parte de la Edad Media se la llamó :LA BATALLA, pues hasta entonces, ni después hasta el siglo XVI, nadie puso en liza tal número de contendientes. La noticia se dio por toda la cristiandad y las campañas de la iglesias europes tañeron como lo había hecho cuando Toledo volvió a ser cristiana en 1085.
Podemos decir que GRACIAS A LA GENEROSIDAD DE NUESTROS MAYORES, ENCUADRADOS EN LOS EJÉRCITOS DE LAS ESPAÑAS, NUESTRAS MADRES, HERMANAS, ESPOSAS E HIJAS NO TIENEN QUE LLEVAR VELO NI “SHADOCK”.
*Hemos puesto al inicio de esta Tradición la manera de medición del tiempo de esa época, que en España era específica y frente al esto de Europa que era A.D. nuestros padres tenían lo que se denomina la Era Hispánica que suponían 38 años más.