Tensión en el parlamento
(Ahorainformacion.es)- El teatro de la partitocracia no se adapta bien a los tiempos del virus. El posible que al haber menos personas en el hemiciclo los señores y señoras portavoces no puedan evitar adoptar entre ellos un trato más humano. Igual o más tenso que nunca, pero más humano.
Ayer, la vicepresidente Carmen Calvo, abrumada tal vez por una lista interminable de recriminaciones, invitó a tomar un café a Cayetana Alvarez de Toledo. Por su parte, el rifirrafe de la diputada Macarena Olona con el ministro Grande-Marlaska dejó de lado las grandes cuestiones ideológicas y bajó a lo más personal. No tuvo nada de cordial sino mucho de misterioso cuando acusó al ex-juez de no se sabe qué grave y cobarde comportamiento que habría sucedido hace 20 años en Bilbao en el contexto de la lucha contra ETA. No se preocupen, la historia saldrá a la luz y se la contaremos.