El Papa Francisco defiende la vida y la familia en Chile y Perú

El paso del Papa por Hispanoamérica ha sido accidentado y, a la vez, muy positivo para las gentes de Chile y Perú. Sobre todo en el contexto de las leyes pro-muerte que ha aprobado la ex-Presidenta chilena, Michelle Bachelet. A la llegada de Chile, en el primer discurso en el Palacio presidentacial de la Moneda, el Pontífice dijo que “el alma de la chilenía es vocación a ser, esa terca voluntad de existir, vocación a la que todos están convocados y en la que nadie puede sentirse excluido o prescindible”. También dijo que dicha vocación “reclama una opción radical por la vida, especialmente en todas las formas en la que ésta se vea amenazada”. Por otra parte, el Papa Francisco agradeció al Rector de la Universidad Católica “el iben que hace con su sapiencialidad en el gobierno de la universidad y en defender con coraje la identidad de la Universidad Católica”. Así lo dijo en medio de un ambiente de acosos al dirigente educativo por su firme compromiso por la vida y la familia. Por otra parte, el pasado 17 de enero, durante su visita al sur del país, el Papa Francisco bendijo en el aeródromo de Temuco la imagen de “Nuestra Señora del Niño por nacer”. Una imagen muy querida por los católicos chilenos a la par que polémica por su defensa implícita de los no nacidos.

El viaje del Papa ha sido accidentado ya que ha habido a su paso numerosos ataques a templos católicos por parte de los enemigos de la Iglesia. Por otra parte, ha habido algunos problemas de seguridad en el transcurso de la visita, como por ejemplo cuando una carabinera que le escoltaba tuvo un accidente grave y fue atendida personalmente por el Papa hasta que llego la ayuda médica. Quedarse parado en un sitio durante mucho tiempo y con tantas multitudes a su alrededor es especialmente peligroso.

La anécdota más sonada ha sido como el Papa Francisco casó a una pareja en pleno vuelo hacia Perú, a casi 10.000 metros de altura. ¡