Navarra: reflexión a mons. Pérez González. Con todo respeto.
(Por José Fermín Garralda) –
Alguien entre nosotros tiene que informar. Estamos en momentos de encrucijada o coyuntura. El futuro dependerá de cómo se retrate cada cuál, tanto mons. Pérez González, con su poder de servicio, como si son personas de a pie.
Las pruebas de hoy son antesala de pruebas mayores, de modo que claudicar hoy anuncia mayores caídas. ¿Claudicar ante quién?: ¿ante la parte contraria, que tiene un proyecto totalizador y radicalmente laicista y persecutorio contra la religión positiva?
A prueba está la Iglesia en Francia, cuando el obispo de Bayona, mons. Marc Aillet, recuerda que la ley de Dios es superior a la ley del Estado, y que la Asamblea Nacional francesa convierte a dicha República en una verdadera “diosa” en su proyecto de ley de “confirmación del respeto a los principios de la República”. A prueba está la Iglesia en EE.UU. cuando cinco obispos advierten al Congreso que la “Equality Act” atenta contra la libertad religiosa y de conciencia, pues dicha ley de Igualdad castigaría a los grupos religiosos que se oponen a la ideología de género. A bregar con lo que toca: mucho o poco es lo de menos.
A prueba está -en otro grado- la Iglesia en Navarra cuando su Arzobispo, mons. Pérez González, prohíbe a la Hermandad de Caballeros de la Cruz la celebración de la Santa Misa en la cripta del Monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada. ¿Será por culpa de la Hermandad, será por el lugar mismo, o será por lo que escupen sus enemigos? Acostumbrados a que callemos en la Iglesia, he aquí la participación eclesial de los fieles. Consternados, aquí nadie está desesperado.
Que no me hablen de Libertad cuando no se respetan libertades. Que no me hablen de respeto, sin memoria y agradecimiento hacia nuestros padres y abuelos que dieron su vida por Dios y España en 1936, lo que en realidad hoy se proyecta quebrando la libertad religiosa de los católicos. Que no me hablen de democracia con totalitarismos de muecas burlonas. Que no me hablen de la verdad, silenciada ante quienes nos hacen la guerra psicológica, y mienten mezclando todo. Que no me hablen de prudencia quien se pliegue a las interpretaciones ideológicas de los enemigos, lo que les permitiría todo.
Con tanta exclusión y la trampa del comunismo que se viste con ropajes ajenos (es demócrata, defensor del oprimido, antifascista…), al final sólo queda el PODER del Ejecutivo y una oligarquía egocéntrica, en contra de las libertades. El PNV les ríe las gracias como un mono para no quedarse atrás, antes de ser tragado por aquel.
La Hermandad, y el monumento de Navarra, sólo molestan a los intolerantes y talibanescos. Ayer aquella cuidaba el monumento, y hoy su cripta transformada en piedras vivas. La Navarra de siempre, reza por los suyos y por todos, dejando su pasado con equilibrio en el ayer y promoviendo la devoción. ¿Qué hubiera ocurrido de ser el caso contrario, esto es, un monumento dedicado a los gudaris, brigadistas internacionales, o milicianos? ¿Pueden decírmelo monseñor, el alcalde y los navarros?
En Navarra hay muchas hermandades, pero sólo una no puede cumplir sus fines. El arzobispo le propuso asistir a la Santa Misa en la S.I. catedral, pero algún miembro de su Cabildo se opuso. Así, esta fidelísima Hermandad ha quedado postergada y olvidada, castigada sin culpa, humillada y culpabilizada. ¡En qué poco se le considera! Mientras tanto la Sra. Solana ponía su grito hipócrita y totalitario en los cielos.
Tema aparte es que la Hermandad se niegue en redondo -como se niega- a abandonar la cripta, sede suya desde hace 60 años. En ella aquella, rinde culto a Dios y reza por los navarros más próximos y también por todos los demás.
Durante la democracia no tuvo problema alguno, ni siquiera con mons. Cirarda. Ahora, con mons. Pérez González -desde 2003 fue arzobispo castrense de España- sí lo tiene. ¿Será que el marxismo y separatismo desbocados exigen un peaje, que no se debe pagar? ¿O estamos rizando el rizo con estas consideraciones? Si vemos tolerable el totalitarismo de Arana y Stalin, es porque cavamos la tumba del mañana. ¿Y qué dicen de todo esto los liberales, si existen?
La Hermandad, directamente fundada por mons. Olaechea en 1939, es algo muy serio y nada folclórico. Sus miembros hacen un juramento ante Dios. Sus Reglas, actualizadas el 9-I-2006, dicen: “El fin principal de la Hermandad es el de alimentar y promover la vida cristiana y la perfección espiritual de sus miembros, comprometidos especialmente en la defensa de la fe católica y en el crecimiento de un orden cristiano en los diferentes sectores de la vida social, personal y familiar, profesional y económico, cultural y político, en continuidad y fidelidad al espíritu y a los ideales de quienes dieron su vida por defender la fe y el Reino de Dios en la tradición católica de España.
Asimismo, sufragar sus almas, tributándoles de esa manera, nuestro eterno homenaje y agradecimiento, y haciendo que, al conservar el recuerdo de su nombre, sea escuela de religiosidad y de patriotismo para las futuras generaciones.
Sufragar, también, las almas de todos los hermanos y hermanas fallecidos o que fallecieren en lo sucesivo” (Arg. 5). La Santa Misa mensual se aplicará “en sufragio de los que murieron luchando por Dios y España y de los Caballeros y Damas que hayan fallecido o fallecieren perteneciendo a la Hermandad” (Art.7).
Escribimos a título particular no sin sonrojo y cierta vergüenza por lo poco que somos, sin debernos a sacerdotes amigos ni a la administración eclesiástica, dejando la puerta abierta a la reconsideración episcopal. Es la hora de la verdad.
Publicado en “Siempre P’alante” nº 849 (8-III-2021) pág. 14
Un comentario en “Navarra: reflexión a mons. Pérez González. Con todo respeto.”
zuma
Excelente exposición José Fermín. Al que mucho se le dío..mucho se le exigirá..