LA HABITACIÓN DEL DINERO
Por Miguel Ángel Pavón Biedma
Es un lugar donde las clases acomodadas de Guinea Ecuatorial guardan el dinero para evitar que fluya y cree riqueza.De esta forma se evitan riesgos, manteniendo un cambio fijo, se someten voluntades y se conserva el principio de que un pueblo pobre y amedrentado suele ser dócil. Momento llegará propicio para sacarlo en aviones presidenciales y convertirlo en euros o dólares, amén de diversas propiedades en el extranjero. No hay problema. El país europeo que creó ese pueblo, a base de accidente geográfico, lapicero y cartabón, mirará para otra parte y se cumplirá el principio fundamental de su vida pública : detrás de una empresa corrupta guineana siempre hay otra española de similares características. El pueblo sueña con venir a España creyendo, erroneamente, que es un paraíso mientras funcionarios consulares repoludos que cobran elevados sueldos, se dedicar a sellar o denegar visados, muchas veces arbitrariamente. Pero no se preocupen hay suficientes mecanismos para que todo siga igual y que, los que pueden cambiar algo, miren para otra parte.
En estos seis años que he vivido en Guinea Ecuatorial he vivido suficientes experiencias que deben ser conocidas. Ahora, lejos de las garras del tirano es el momento de contar alguna de esas peripecias. Será curioso. Pero dejará de serlo para los centenares de niños que mueren de paludismo cerebral simplemente por decidia, para los padres que tienen que enterrar a sus hijos o los expatriados que, a diario, sufren la extorsión de la policía.
Bienvenido a mi patria, aunque tenga el hábito de mirar siempre a otra parte para que el fuerte siga siendo fuerte y el tirano (con sus dos mujeres) un Tirano Banderas resucitado que haría las delicias de nuestro Valle Inclán.