Por fin viernes. ¿Qué está pasando hoy por el mundo?
21 de febrero – San Pedro Damián, San Germán, San Roberto Southwell.
ESPAÑA
Buena y sorprendente noticia relacionada con el Ejército de España. Nuestras Fuerzas Armadas celebran uno de los mayores ejercicios militares en Málaga. Estas maniobras coinciden con los últimos episodios protagonizados por decisiones unilaterales de Marruecos y Argelia que afectan a las aguas españolas de Canarias y Baleares respectivamente.
El PNV pasa factura a Sánchez por su voto en la investidura. El Partido Socialista ha confirmado, por boca de la secretaria de su organización en Vascongadas, Idoia Mendia, que la autonomía que controla el PNV pasará a gestionar la Seguridad Social. Con una fórmula chocante y poco tranquilizadora pues, en palabras de Mendía: “Las pensiones las va a seguir pagando y garantizando el Gobierno de España, pero la gestión de los fondos, los medios materiales y edificios dependerán del Gobierno vasco”
HISPANIDAD
El grupo de Lima, que reúne a los ministros de asuntos exteriores de 15 países -entre los cuales no está España- se ha reunido en Ottawa (Canadá) para volver a hacer un llamamiento a la celebración de elecciones presidenciales en Venezuela. No ha trascendido ninguna otra decisión, ninguna otra medida. El régimen chavista lleva camino de eternizarse en el poder. No parece que a Maduro le vayan a afectar demasiado este tipo de declaraciones.
INTERNACIONAL
Alemania. El último macabro caso de “terrorismo racista” acaba con la vida de once personas. El gobierno se apresura a garantizar que luchará contra el racismo y la xenofobia. ¿Caso aislado o síntoma de un grave conflicto latente?
BATALLA CULTURAL
¡Ojo! “Biblia LGTBP”. Después de las consabidas amenazas el día ha llegado. El lobby LGTBP ya tiene su propia “biblia” titulada “Biblia de Estudio. Teología inclusiva”. Antiguamente los enemigos de Dios quemaban la Biblia, ahora se hacen una a su medida.
Nueva vuelta de tuerca del igualitarismo enloquecido. La ministra de Igualdad, Irene Montero, amenaza con impulsar una “Ley de Igualdad Sexual” que, de triunfar, podría condenar a la humanidad a la pura extinción. Basada en una antropología enfermiza podría dejar en anécdota las injusticias provocadas actualmente por la Ley contra la Violencia de Género.