España es una de las principales consumidoras de antidepresivos en Europa
El consumo de antidepresivos de los tres grupos principales (antidepresivos, ansiolíticos e hipnóticos y sedantes) se triplicó en España entre los años 2000 y 2013, pasando de 26,5 a 79,5 dosis por mil habitantes, según datos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.
A continuación mostramos la evolución de estos tres grupos de medicamentos en España con respecto al resto de Europa entre los años 2000 y 2015 según los datos de la OCDE.
Antidepresivos ISRS
Los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS) son los antidepresivos más comunes. Se caracaterizan por ser más “light”, ya que tienen pocos efectos secundarios, y sirven para combatir la ansiedad. En el año 2000 su consumo en España era parecido al europeo, pero ha crecido más rápido hasta situarse un 20% por encima de la media europea.
Hipnóticos y sedantes
El consumo de hipnóticos y sedantes en España era inferior a la media de consumo europea en el año 2000. Sin embargo, mientras en Europa ha ido disminuyendo, en España ha crecido hasta situarse en un 37% superior a la media europea.
Ansiolíticos
El cambio en este grupo de medicamentos es el más llamativo. Como en los hipnóticos y sedantes, el consumo europeo ha bajado ligeramente entre 2000 y 2015. Sin embargo, en España ha aumentado claramente hasta un 20% por encima de la media de Europa, situándose en el tercer puesto de los países europeos de la OCDE.
El doctor Juan Simó, médico de familia en la Rochapea, Pamplona, afirma que estos cambios en el consumo se ven acentuados a partir del año 2008, por lo que sugiere que estén a menudo asociados con la crisis económica.
Los niños se ven especialmente afectados por esta situación: en las familias en las que el subsidio de paro se ha agotado o sólo se cobra una renta mínima de inserción, el porcentaje de consumo de psicofármacos entre niños es de entre el 4% y el 6%, mientras que en familias con ingresos anuales de entre 18.000 y 100.000 euros el porcentaje es de entre el 2% y el 3%.
Simó también indica que el aumento tan marcado del consumo de ansiolíticos puede deberse a que en España se ha tendido a tratar los trastornos de sueño con ansiolíticos en vez de con hipnóticos, como suele hacerse en el resto de Europa.
Por último, Simó destaca también la relevancia del hecho de que los ansiolíticos e hipnóticos y sedantes hayan crecido en contra de la tendencia europea, que ha decrecido, y lo califica como “preocupante“.
Las empresas farmacéuticas hacen negocio con estos cambios. Al mismo tiempo, el Colegio de Psicólogos critica que “mientras que un 30% de las consultas de atención primaria están relacionadas con la salud mental, la ratio de psicólogos por cada 100.000 habitantes es una de las más bajas de Europa”.
Más información en el blog de Juan Simó, médico de familia.