Ir al contenido

Seguir el blog (Follow.it)

Aumenta un 15% el absentismo laboral en las empresas españolas

15 de diciembre de 2016 1 Actualidad / /

El absentismo crece de una manera muy peculiar

El pasado 21 de noviembre se conocieron los datos de un estudio que realizó a 500 empresas Asepeyo, mutua de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales. Los datos más preocupantes que presentó la compañía es que el absentismo laboral está creciendo a marchas forzadas. Estos son algunos datos para retratar la realidad que estamos viviendo:

  • En los primeros 8 meses de 2016 (enero – agosto) se ha disparado el absentismo un 8,86% más que el año anterior. Si ya había una tendencia creciente en lo que concernía a las bajas laborales, esta se ha vuelto más acusada.
  • La afiliación a la Seguridad Social ha crecido un 3% en el mismo periodo (enero – agosto de 2016) por lo que el absentismo crece casi tres veces más que el empleo.
  • Estos datos contrastan con la bajada en picado del absentismo laboral que se produjo en los años más duros de la crisis económica (2008 – 2013).
  • Los casos de baja de menos de 16 días se han incrementado significativamente y éstas son las que más coste suponen para las empresas.
  • Según el estudio, más del 80% de los trabajadores no se han dado de baja todavía en lo que va de año; un 11,9% una o dos veces y un 5,59% tres o más veces.
  • El perfil de la persona que falta a su puesto de trabajo sería mujer de entre 31 y 40 años con una antigüedad entre 0 y 6 años en su compañía, del sector servicios y que recibe la baja por una lumbalgia.
  • El 48% de las bajas se producen entre el lunes (28%) y el martes (20%).
  • 6 de cada 10 bajas se producen en trabajadores de más de 3 años de antigüedad en la empresa.
  • El absentismo que solo dura entre 0 y 3 días ha crecido un 20,4% en el último año.

Las formas precarias de luchar contra el absentismo de las empresas españolas

Las empresas, los directivos de recursos humanos y demás encargados de la gestión del absentismo arrojan estos datos complementarios, también recogidos por Asepeyo:

  • El 79% de los directivos considera que la gestión del absentismo es un problema importante para su empresa.
  • La mitad de ese 79% en cambio reconoce que no tiene una definición en su organización.
  • La otra mitad reconoce el absentismo como una peculiar forma de faltar al trabajo. En su mayoría (81%) estas empresas incluyen todo tipo de ausencias, mientras que solo el 19% se refiere al absentismo como ausencia injustificada.
  • Casi el 50% de las empresas apuesta para solucionar el absentismo por medio del control de bajas.
  • Sólo el 18% de las empresas apuesta prioritariamente por la prevención de riesgos laborales.
  • Sólo el 12,5% promociona la presencialidad por la organización del tiempo de trabajo de manera más satisfactoria
  • Solo el 11,1% promueve la salud de sus empleados en la empresa
  • Solo el 3,1% ofrece programas de ayuda al empleado
  • Sólo el 1% de las empresas tiene planes de movilidad vial contra este problema y el 0,35% opciones de teletrabajo.

Por lo que se puede deducir de los datos expuestos, existe un sector de la población trabajadora que, después de la fase más aguda de la crisis económica, ha desarrollado “alergia” a su puesto de trabajo. En muchos casos la enfermedad, sea real o no lo sea, se desarrolla el último día del fin de semana para tomar la baja médica el lunes o el martes mayoritariamente. Alargando el periodo no laborable, cada vez en más casos, a lo sumo 3 días. Que todo esto coincida en un período de recuperación es preocupante porque el tejido productivo de un país se basa en sus relaciones laborales y en la buena marcha de las empresas. Si el absentismo prolifera en un país que crece, eso no es signo de salud institucional.

La causa: una falta de un ambiente de trabajo basado en el compromiso

Ayming es una empresa consultora que ha colaborado en la medición del absentismo

La consultora Ayming, en su barómetro sobre el absentismo publicado en este año, ha indicado que las circunstancias que pueden llevar a ausentarse a los trabajadores de su puesto son las condiciones de trabajo, la falta de motivación, el clima laboral, las herramientas de control utilizadas por los directivos y la escasa calidad de vida que el puesto les ofrece tanto a nivel de retribución como a nivel de conciliación familiar. Estas circunstancias se justifican en su mayoría en concepto de contingencias comunes (enfermedad o accidente), según la consultora, siendo estas cinco veces superiores a las contingencias laborales.

Las ausencias tienen una repercusión directa en los datos económicos de toda la sociedad. La inversión se hace menos eficiente, pues supone un incremento de los costes directos (imputables directamente a la producción) e indirectos (no imputables directamente a la producción) de la empresa. Además, para la Seguridad Social, el crecimiento del absentismo laboral asciende a más de 5.000 millones de euros y para las empresas a casi 4.000 millones de euros por la prestación económica en los primeros días de baja. Sin embargo, el 40% de las empresas no miden el absentismo y el 60% o no define bien esta realidad o no promueve soluciones integrales que se hagan cargo del fondo de la persona.

Las consultoras de Recursos Humanos reconocen que el problema causante de este crecimiento es la falta de compromiso por parte de los trabajadores. Sin embargo, parece un tanto injusto hacer una calificación tan unilateral. Un directivo que no pone los medios para comprender por qué un trabajador no está satisfecho con su puesto de trabajo, tampoco está comprometido por completo en la actividad económica que realiza. Un ejemplo positivo de directivo comprometido: es comprensible e incluso necesario, dependiendo del carácter del empleado, que pase temporadas en casa. Si como responsables reconocemos el valor de su actividad y le permitimos que la desempeñe en ocasiones desde casa o desde otro lugar, somos flexibles y potenciamos soluciones intermedias entre las necesidades del puesto de trabajo y las del empleado. No obstante, hay una constante entre el mundo de la dirección de empresas por la cual se cree que si se es demasiado flexible con el trabajador, habrá menor rendimiento, sobre todo en materia de presencialidad.

Capitalismo vs compromiso

La estructura económica que España tiene es deudora del capitalismo. La palabra capitalismo es polémica tanto para sus detractores como para sus defensores de uno u otro signo. Para entendernos digamos que llamamos capitalismo a aquella concepción de la economía en la que el trabajo es secundario en el tejido productivo, frente al capital (sea material o monetario). Para entendernos: el trabajo es el elemento personal, la persona que desempeña una actividad en el proceso de producción; el capital en cambio son los medios que hacen posible ese trabajo. Pero resulta que los medios, sin el elemento personal, no pueden desarrollarse.

En este sistema, la propiedad de una empresa se determina en la mayoría de los casos por el dinero que se aporta a un proyecto, considerando el elemento monetario como el fundamental en una inversión. Esta forma de ver las cosas a menudo menosprecia el trabajo, pues lo convierte en un elemento más del capital. En lenguaje popular diríamos: “yo pago a un mercenario, a un trabajador, y sus horas son propiedad mía porque yo le he pagado”. En cambio, Álvaro D’Ors decía que el trabajo es impagable porque es una actividad tan íntima de la persona que su precio es infinito…

Todo parece indicar que el problema principal del absentismo laboral es el compromiso, tal y como algunas consultoras han dicho. Sin embargo es posible que la solución no esté dentro del sistema capitalista. ¿Son suficientes los salarios para conseguir que el tejido económico de un país o una empresa en particular crezca? También es importante implicar a cada uno de los empleados en la formación, en el sostenimiento y en la cultura corporativa. Las medidas sociales y la protección al empleado contra el despido son buenas indiscutiblemente, pero es necesario que los trabajadores alcancen una mayor responsabilidad en sus puestos de trabajo. El compromiso se mide en términos de responsabilidad y no solo en términos de beneficios económicos.

Un método de trabajo que aplican empresas de éxito consiste en dar libertad a los trabajadores para desempeñar su trabajo dentro de una disciplina horaria amplia. Se trata de un riesgo -y una oportunidad- que se suele combinar haciendo variable una parte del salario según sean los resultados (tanto en positivo como en negativo). Un ejemplo conocido es el que aplican empresas cooperativas como las del grupo Mondragón. Los trabajadores cooperativistas tenían la opción de hacerse con una participación de la empresa y de esta forma participar de mayor retribución en tiempos de buenos resultados económicos… y de menor sueldo en tiempos de malos resultados. La coherencia es el signo más importante del compromiso laboral. En cambio, lo más extendido, por desgracia, es un modelo en el que se mide cuántas bajas ha tenido un trabajador para calificarlo.

Habría que tener en cuenta además el creciente número de enfermedades psiquiátricas en una España desnortada y sometida a ritmos de vida muchas veces inhumanos o antifamiliares. No se podrán introducir mejoras o corregir malas prácticas en las empresas sin entender las circunstancias del hombre moderno. Solo atendiendo a estas realidades -y a muchas otras que nos dejamos en el tintero-, podremos acabar con esta lacra del absentismo, reflejo de un descontento generalizado con el mundo laboral.

Rate this post
(Visited 351 times, 1 visits today)

Un comentario en “Aumenta un 15% el absentismo laboral en las empresas españolas

  1. Anarco Carlista

    Muy interesante el artículo por proponer reflexionar sobre un asunto sobre el que no se profundiza por lo general lo suficiente.

    El absentismo está “consentido o justificado” en una mayoría social.
    Este abuso e injusticia absentista se apoya socialmente en que los potenciales actores de esa acción son MAYORIA en la sociedad ya que hablamos de empleados o trabajadores por cuenta ajena que son LA MAYORIA DE LLOS TRABAJADORES . Y POR OTRA PARTE en que existe una especie de “consenso social” cultural marxista en que no es malo que se abuse de las bajas porque el capital es malo , el jefe abusa y la empresa se lo merece y por tanto el pobre empleado merece de vez en cuando devolversela.

    La minoría son los autónomos (pese a ser muchos) y los empleadores . EStos dos últimos (autónomos y empleadores) tienen más conciencia en lo malo y criticable de ello.
    sin embargo entre la mayoría hay más PERMISIVIDAD o dicho de otro modo COMPRENSION y justificación.

    ES CIERTO POR OTRA PARTE es muy interesante dar más responsabilidad a los trabajadores y flexibilidad horaria cuando es posible -que lo es en muchos casos – buscando mas objetivos o cumplir hitos y estando disponibles teniendo a la vez flexibilidad. Esto es cada vez mas posible en muchos tipos de trabajo aunque sigue siendo imposible en otros muchos que tienen que cumplirse unos horarios concretos y unas jornadas concretas.

    Responder

Deja tu comentario

Ahora Información agradece su participación en la sección de comentarios del presente artículo, ya que así se fomentan el debate y la crítica analítica e intelectual.


No obstante, el equipo de Redacción se reserva el derecho de moderar los comentarios, sometiéndolos a una revisión previa a su autorización.


Aquellos comentarios que lesionen el honor de terceros o incluyan expresiones soeces, malsonantes y ofensivas no serán publicados.


Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*
*