Fallece don Santiago Arellano Hernández, Consejero Nacional de la CTC

(Ahorainformacion.es) –

Este martes 5 de diciembre ha fallecido en Pamplona a los 79 años don Santiago Arellano Hernández, Consejero Nacional de la Comunión Tradicionalista Carlista (CTC).

Como bien recuerda José Fermín Garralda en su artículo de hoy, don Santiago fue un destacado y querido miembro de la Comunión. Padre de tres hijos y con una profunda vocación por la enseñanza, era catedrático de literatura y llegó a ocupar la Dirección General de Educación del Gobierno de Navarra durante doce años.

Así mismo, impulsó la fundación pedagógica Amado Alonso y publicó, entre otros, precioso libro titulado “Aprender a mirar para aprender a vivir: Memorias literarias de un profesor católico“, todo un canto de amor a la literatura en el que, sirviéndose de su amplísima experiencia como profesor nos enseña cómo, “a través de obras universales de todos los tiempos, ya sea teatro, narrativa o poesía, podemos aprender sobre la condición humana y sobre la vida”.

Iniciado en el Carlismo en el entorno de la Regencia Carlista de Estella y Unión Carlista participó con entusiasmo en los Congresos de la Unidad Carlista de los años 80 siendo desde entonces uno de los consejeros más valorado en todos los Congresos. De verbo fácil y siempre maestro, en cualquiera de sus intervenciones en actos carlistas, foros de formación, jornadas de los campamentos Cruz de Borgoña… sabía transmitir de una forma inimitable los principios básicos del Carlismo enmarcándolos en un concepto amplio y generoso de la tradición española y la Hispanidad. En Navarra impulsó, junto con sus amigos del Círculo Familiar Virgen del Camino, la reorganización del Carlismo alentando los actos tradicionales de la fiesta de la Juventud Carlista de Pamplona o la peregrinación anual a San Miguel de Aralar. Es autor de los textos que desde hace más de treinta años se recitan en la consagración de la Juventud Carlista a la Inmaculada o en la renovación de la consagración de las Juntas Carlistas a San Miguel.

Descanse en paz, don Santiago.