Seguir el blog (Follow.it)Cómprate una gallina y vuelve a la despensa, no desestabilices tu matrimonio.
Toda la vida viviendo a Madrid. Desde hace años vivo en pueblos.
En Asturias los Hórreos son parte del paisaje rural, por Castilla abundan las despensas, los patios traseros y corrales, los huertos.
Me decían en las fiestas de San Roque que antes todo el mundo tenía su huerto. Hay gente que se piensa que lo del huerto es difícil, pero no lo es tanto. Consigues un trozo de tierra preguntando a vecinos, agricultores de la zona o al ayuntamiento. Y algo saldrá a base de insistirle a Dios.
Por Castilla no falta la gente que tiene conejos o gallinas que le dan sus dos huevos diarios. No es difícil tampoco. Unas paredes o rejas y para adentro, comen su pienso, beben su agua. Poca cosa más. Y preguntando al de la tienda que te los vende que mas cuidados necesitan. Poca historia más.
Esto hoy en día, actualidad de vida urbanita, es más difícil, sin embargo, tener despensa, no es tan difícil. En los pueblos antes se daba de forma natural, se hacía matanza y se guardaba para el resto del año. Lo mismo con el tomate. Se recogía y embotaba para el resto del año. Hoy sin embargo muchas neveras en la ciudad están vacías y se dice la gente: si voy al supermercado y mañana no hay comida ya veré que hago. Está bien la confianza en la providencia, pero también hay que buscar sitio mientras se le reza a San Cristóbal para aparcar.
Estamos en una época en la que los gobiernos buscan destruir presas para privatizar el agua, y se ponen trabas a las ganaderías para controlar la producción artificial de alimentos. No podemos dejar la supervivencia de nuestros hijos a expensas del capricho del día de Pedro Sánchez y su mente ya viciada de tanto buscar hacer la triquiñuela.
Por este motivo, si podéis, haceros un pozo, si podéis tener varias despensas o una. Y si podéis tener un sistema para controlar no tirar los alimentos por caducidad. Es un elemento a considerar al ir al supermercado mirar la fecha de caducidad, no por si caduca el tema en 15 días, sino por si caduca en varios años. Y tener una pequeña reserva en casa, por si Pedro Sánchez dice: no hay gasolina, para que te de tiempo a reaccionar.
La vuelta a la tradición de la despensa, del huerto, de la matanza del pueblo. ¿Tienen acaso el mismo encanto que el chino de la esquina? No digo que se tenga que volver a vivir sólo de huerto y despensa, pero es cierto que son factores que hay que considerar, lo mínimo: tener una pequeña despensa. Lo del huerto, las gallinas, el pozo y los conejos es cosa de gente privilegiada. Y ya el cerdo en casa ni te cuento.
Me acuerdo en un pueblo que viví una señora me decía: Mi Julio se quedó en paro, lo primero que hice fue comprar unas gallinas. Santa señora. En la ciudad habrá alguno que te dirá: mi marido se quedó en paro, se tambaleó mi relación. Sencilla santidad la grandeza de la señora de aquel pueblo. Admiración por esta señora.