Los supuestos agentes sociales y el Gobierno aprueban una subida del Salario Mínimo Interprofesional

La CEOE y los sindicatos han firmado ya el acuerdo para la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) desde 2018 hasta 2020 en el Palacio de la Moncloa. Para el año 2018 se subirá en casi 18 euros mensuales (252 euros anuales) el sueldo de los más desfavorecidos de este país que tengan contratos legales. En el acto estuvieron presentes Mariano Rajoy, Presidente del Gobierno; Fátima Báñez, ministra de Empleo; los representantes de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y representantes de los sindicatos más influyentes.

¿Cómo valorar el acuerdo? Por una parte, en la teoría es bueno que empresarios, Gobierno y sindicatos acuerden una mejora de las pagas para los peor pagados. Un compromiso que no nace solo de la iniciativa del Estado, sino también de trabajadores y empresas. Por otra parte, en realidad el Salario Mínimo Interprofesional es un artilugio del sistema para mantener el paupérrimo estado de la economía de la gente real, la economía no ya de la cartera, sino del monedero. 

Impuestos altos a la contratación de empleados por parte de las empresas, gasto público invertido en las estructuras partitocráticas mastodónticas, el fracaso del proyecto educativo en la época constitucional, la falta de incentivos para realizar un trabajo de calidad por parte de trabajadores y empleados públicos; sindicatos que se centran en la ideología y no en el progreso laboral de sus propios compatriotas… El problema de fondo no es solo que se pague mal a los trabajadores. La esclavitud social a la que nos vemos abocados proviene de un sector público copado por el caciquismo moderno y también de un estatalismo que no solo bloquea la iniciativa empresarial, sino también la iniciativa social. También proviene de instituciones supuestamente sociales que sirven a intereses elitistas y no a la gente concreta. No nos llevemos a engaño: el Salario Mínimo Interprofesional no es la solución para las consecuencias negativas de la crisis económica de 2008.

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